lunes, 26 de enero de 2009

GTA IV Xbox 360





GTA IV

Trailer comparativo con la playstation 3:




Un juego como éste merece ser analizado en apartados. Por extensión, por calidad del juego, y porque sí, porque es lo que nos pide el cuerpo. Vamos allá.

La historia

Niko Bellic luchó en la guerra de los Balcanes del lado serbio. Allí hizo cosas malas, muy malas. Al terminar la guerra, se dedicó a otros negocios un tanto oscuros, y alguno salió mal. Tan mal que tuvo que huir de su país. Aprovechando que su primo Roman está instalado al otro lado del mundo, en Liberty City, para allá que se va, buscando vivir el sueño americano. Por lo que le ha contado su primo, todo le va sobre ruedas. Cuando Niko ve la realidad es consciente de lo mentiroso que puede llegar a ser su parlanchín primo. Ni vive en una mansión, ni está rodeado de las más bellas mujeres, ni conduce los coches más lujosos. Así son las cosas cuando llega Niko. De ti dependerá que así sigan, o que colmes tus esperanzas, sea o no con tu primo.
Conocerás a gente que te irá abriendo camino en ese difícil mundo que es la mafia, las drogas, los robos,... Y no sólo conocerás a delincuentes. Podrás hacer vida social como todo el mundo, tener novia, ligar, ir a bares, jugar al billar, emborracharte. Vamos, como la vida misma.La ciudad

San Andreas era más grande, pero ni de broma se acercaba al grado de detalle que ofrece Liberty City. Y no hablamos ya del aspecto físico de la ciudad, de su mapeado, arquitectura y urbanismo. Hablamos también de lo que le da vida a una ciudad: sus habitantes. Hablan por el móvil, leen el periódico (bajo el que se cubren y echan a correr cuando se pone a llover), discuten, compran, cargan bolsas que pueden desparramarse si les empujas, paran taxis, descargan equipaje del maletero de su coche, hacen footing por el parque,hay obreros dándolo todo en la obra, mendigos (de ti depende darles limosna... o patearles, sólo tú decides), son perseguidos por la policía (algo habrán hecho) o atendidos por una ambulancia (probablemente, algo habrás hecho), son parados en controles en la autopista, pagan el peaje de la misma,... Y no sólo interactúan entre ellos, sino que contigo responderán según la situación y tu forma de actuar. Párate al lado suyo y te mirarán raro, te preguntarán qué haces... Tira sus bolsas de la compra y se escandalizarán. Dispara a su lado y tal vez intenten reducirte como héroes caseros o tal vez salgan corriendo gritando y llamando a la policía. Choca contra su coche y puede que sólo quieran explicaciones, o puede que quieran tomarse la justicia por su mano. En fin, ejemplos hay infinitos, y todo se puede resumir en una frase: en cuanto a la vida que ofrece el juego, San Andreas era un 20% de GTA IV,por mucha extensión de terreno que ofreciera la anterior parte de la ya mítica y clásica saga GTA.
Hay más interiores que en San Andreas. Los restaurantes, salas de espectáculos o comedia, los locales de striptease, los bares, las tiendas de armas y ropa, casas accesibles porque son escenario de alguna misión,... Hay muchos sitios donde Niko puede liarla a cubierto, y de varios pisos, y con gente viviendo (oyes la tele a través de la puerta),... Eso sí, saquémosle punta: en Saint's Row puedes atracar los comercios, y aquí es exigible. Si puedes entrar armado, apuntar al encargado que está al lado de la caja, y que éste levante las manos y se quede quieto, ¿por qué no va a poder el tipo abrir la caja y darnos su maldito dinero? Es exigible visto lo que hemos podido ver en GTA IV.

Liberty City imita a Nueva York, tanto en la forma como en el fondo. Tiene su Estatua de la Libertad (Felicity Statue), su barrio chino, su Times Square, su puente de Brooklyn, su Central Park.Todo se parece sospechosamente a la Gran Manzana, pero siempre con un punto más irreverente. Los neones anuncian de todo menos marcas de televisores. Los eslóganes son de troncharte de la risa. Los comercios tienen nombres que sólo pueden estar sacado de mentes perturbadas. Liberty City lo tiene todo para ser el mejor escenario que hemos visto en un videojuego.

Y al volante, todo es igual de parecido a la vida real. Parado en un semáforo podrás oír la radio del coche de al lado. Estámpate a toda velocidad contra otro coche o un muro, y Niko atravesará el parabrisas. Dispara al conductor y el parabrisas te recordará al coche de Pulp Fiction. Los agujeros de bala y demás daños y arañazos en la carrocería permanecen en memoria, y si se te revienta una rueda (o si te la revientan, que la policía no es tonta), terminarás con la llanta en el asfalto soltando chispas.
No es lo mismo conducir a las 3 a.m. que a las 9 a.m. La hora punta es la hora punta, hay atascos y malhumor. Y por la noche hay buen rollo y poco tráfico. Como debe ser.
Podrás poner las largas o las cortas, ponerte a dos ruedas en moto (30G por pasar el peaje haciendo un caballito), disparar (después de haber roto la ventanilla con la culata de tu arma, o de una patada, o con el codo, según como le dé al bueno de Niko), y el coche no explotará por el mero hecho de volcar.
A pie o en coche, vivirás una doble vida en una ciudad que terminarás haciendo tuya.
GTA siempre ha sido jugablemente perfecto. Pero es que ahora es mejor todavía. Se le han añadido pequeños detalles que terminan de redondear un aspecto fundamental.Lo básico se mantiene. Gatillos para acelerar/frenar o apuntar/disparar, A para correr (apretándolo repetidamente, Niko esprinta hasta perder el resuello), B para pegar/empujar, X para saltar, Y para robar un coche o montarte en un taxi dejándolo apretado, o subir una escalera. Y con los joysticks manejas la cámara y la dirección. Fin. No se necesita más. Pero si a eso le añades simulación al volante, y no arcade, un sistema de puntería mejorado, un estilo de buscar cobertura que llega a recordar a Gears of War, un modo de combate cuerpo a cuerpo digno del propio Bourne, y una forma de robar coches mucho más realista y divertida (rompes una ventana, le haces un puente y a correr!), terminas puliendo una jugabilidad envidiable, que te hará meterte de lleno en el juego porque te costará encontrar cosas que no puedas hacer.Podrás incluso coger una lata del suelo y tirarla contra un escaparate, contra un coche, contra un viandante, porque te apetece.
Otro pilar de este juegazo: la tecnología de la que haces uso. Con el móvil recibirás tus encargos, todos ellos, como es de rigor, poco legales. O podrás utilizarlo para desestresarte un poco y quedar para echar un billar, o unos bolos, un polvo con tu novia, qué carajo. Todas estas actividades (menos el sexo, maldita sea), son minijuegos, muy logrados y hasta entretenidos. No todos contestarán al móvil cuando tú quieras. Llama a tu chica a las 4 de la mañana y no tendrá palabras bonitas que decirte. Y si llamas al camello fumeta antes de las 2 de la tarde, no querrá saber nada de ti porque la resaca es dura. Y luego también tienes los cibercafés donde consultar tu correo electrónico, mirar en una página de citas o curiosear pro las enormes chorradas que los chicos de Rockstar han tenido a bien incluir en su Internet particular(si Internet tiene mucha basura, tw@, que es como se llama aquí, también).
Algo a destacar es que existe el autoguardado. Al finalizar una misión, tus progresos quedan registrados, no siendo ya necesario que vayas a casa a echarte una cabezadita (seis horas, y repones tu salud) para guardar la partida.
Para terminar con este apartado, cabe destacar algo que no era de esperar en un GTA. Y es la inteligencia artificial de tus enemigos. La policía sabe cubrirse y esperarte fuera de un establecimiento, y sólo los mafiosos más mindundis se exponen al cabreo de un serbio ex militar, rapado y con muy mala leche.Y aquí toca quitarse el sombrero. Buscando una estética de cómic realista, GTA es un deleite gráfico.Unas texturas trabajadas hasta la extenuación, polígonos hasta en la sopa para ofrecer un grado de animación asombroso, un mapeado de la ciudad que hará que tengas que parar el coche y mirar para los lados, hacia arriba, e incluso al suelo para ver el humo saliendo de las alcantarillas, o de tu boca en una noche fría, la sangre en el coche después de atropellar a alguien, las consecuencias de una buena galleta, en la carrocería y en el mobiliario callejero,... Viva el motor RAGE implementado para este juego por la gente de Rockstar, y viva el motor Euphoria, responsable de la espectacular física que se ve en GTA IV. Desde las explosiones hasta la forma de andar de Niko pasando por los accidentes en moto que te harán volar. Contando también con cómo se estrella un helicóptero si le disparas al motor de cola, como cae un coche al agua, como nadas, como peleas, como tropiezas cuando vas borracho.
Todo está cuidado para que todo ocurra como ocurriría si Isaac Newton velase por el juego.
La luz es uno de los efectos más sorprendentes vistos en GTA. Hay cuatro momentos del día claramente diferenciables y progresivos (mañana, tarde, atardecer, noche), y es un espectáculo ver la puesta de sol, o quedarse quieto bajo la copiosa lluvia.
Y las animaciones son de caerse al suelo de culo. Nadie anda igual, ni hace footing igual, ni se tropiezan o mueren atropellados igual. Todo depende de cómo ocurra. No es lo mismo conducir una moto de gran cilindrada con lluvia que conducir un utilitario por el aeropuerto. De verdad, no es lo mismo. Como no es lo mismo chocar con esa moto a 200 por hora que hacerlo con ese utilitario a 50. De verdad. No es lo mismo.
Las secuencias de vídeo son tan tronchantes como llenas de calidad.La gesticulación de Niko y sus compadres es bestial, así como todo lo que ocurre en esas secuencias, que las elevan a arte del género. Bien podríamos estar hablando de una película.Si por algo despuntó de siempre la saga GTA fue por la radio de los vehículos. Emisoras de todo tipo, con enormes canciones de Warner, desde Coltraine hasta Juliette Lewis, pasando por ZZ Top, y mucho Bob Marley. Un enorme repertorio para que vayas por la ciudad escuchando lo que más te apetezca, independientemente, por supuesto, de qué carajo estés haciendo. Ir con Charlie Parker a todo volumen mientras persigues a toda velocidad a un mafioso, de verdad, no tiene precio. Y además están los canales de noticias, que informan sobre las locuras que haces ("una gasolinera ha estallado...").
Y aparte están los sonidos FX y los diálogos. De lo primero, es destacable todo. Los tiros, los choques, los cláxones, los puñetazos, los motores,¿ Todo clavado. Ni una pega. Hasta puedes cambiar el sonido de tu móvil.
Como siempre en GTA, el juego no está doblado pero sí traducido, y muy bien traducido, captando toda la jerga más actual (hay un "cool" que lo traducen como "perita", no como "mola", y se agradece). Ni la tele ni la radio ni las conversaciones callejeras están dobladas, pero eso, a mí entender, es imposible, y no se echa en falta.

Nos encontramos ante un juego realmente destacable en su faceta multijugador. Lo que en un principio parecía una mera excusa para el símbolo de Live se ha convertido en uno de los modos más adictivos enlínea y que ya está fulminando a otros títulos bien estancados en el top 10 de los más jugados como Call Of Duty. La premisa es simplemente sencilla: modos para todo tipo de gustos, siguiendo la filosofía de Halo 3, GTAIV ofrece un amplio abanico de modos y escenarios multijugador (partes de la ciudad de Liberty City).

Entre los modos que vamos a encontrar destacamos:
- Policías y Ladrones: dos equipos de cinco hombres se perseguirán como el ratón y el gato para impedir que escape el capo principal.
- Partida a Muerte: un DeathMatch normal y corriente pero inédito hasta ahora en GTA, bastantedivertido.
- Encargo de la Mafia: los jugadores recibirán encargos a través de su teléfono móvil y tendrán que cumplirlo antes que el resto de los participantes.
- Modo Carrera: recorreremos las calles con el coche que elijamos por circuitos sin reglas, podremos disparar a nuestros rivales, cambiar de coche, entorpecer el paso... muchas posibilidades pero demasiado exigente a la hora de conducir, ya que si nos salimos de la carretera, la recuperación con la cabeza de la carrera será casi imposible.
Hay otros modos ya clásicos dentro del modo online como es el escoltar al Vip, Deathmath solitario... aunque lo que más nos ha llamado la atención es el modo libre, viendo que una de las cosas que más llama la atención a los usuarios de GTA es "armarla", pues ahora podremos hacerlo en compañía viéndonos en ocasiones refugiados en un burger con decenas de patrullas de SWAT que nos persiguen.

El modo online presenta una estabilidad perfecta en la versión de 360 mientras que en Playstation 3 a día de hoy sigue dando problemas, algo ya visto en numerosos títulos ante la buena plataforma de Microsoft.
Esperábamos como agua de mayo este GTA IV y no nos ha decepcionado, y lo tenía difícil después de tanto oír hablar de él. Ya cuando lo probamos nos dejó un muy buen sabor de boca, pero es que ahora ya no es que el regusto sea mejor, es que podemos afirmar y afirmamos que si no tienes una consola de nueva generación, sólo por tener este juego te merece la pena.

Lo bueno:
- Liberty City, entera, en esencia, toda ella, de arriba a abajo y de este a oeste. Amarás la ciudad o la odiarás, pero jamás te quedarás indiferente ante el potencial que exhibe.
- Los gráficos y las animaciones.
- Niko Bellic, el mejor personaje de un videojuego que se ha visto. Digno de llevarse al cine. Sus colegas secundarios no se quedan atrás, desde el rasta fumeta hasta el vigoréxico viciado a la testosterona de tiburón.
- Los diálogos, las voces y los acentos. Indoblable. Viva la versión original para GTA IV. "I own this city".
- La tele, la radio, el móvil e Internet. Bienvenido al Siglo de la Información.
- Los coches, motos, lanchas y helicópteros. Se acabó el arcade, llega la simulación.
- Los combates cuerpo a cuerpo.
- Los habitantes de Liberty City, hacen vida propia.
- El argumento, impresionante, digno de guiones de Scorsese.
- Los interiores (locales, restaurantes, casas,...).
- Liarla por liarla.
- El multijugador, ahora ya imprescindible.

Lo malo:
- Algunos bugs muy puntuales que te hacen chasquear la lengua, que se arreglan rápidopero que ahí están (malos portando armas invisibles, o conducir unos metros una moto boca abajo).
- No poder atracar comercios.
- Fallos en la IA de los ciudadanos: robas un coche, te bajas, al dueño le llaman al móvil, y se va dando un paseo manteniendo una amistosa conversación mientras tu destrozas su coche enfadado porque no te hace caso).

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